Salud Mental Masculina: Guia completa para su cuidado

Las enfermedades mentales no discriminan. Cualquier persona puede sufrir depresión, ansiedad y otros trastornos mentales. Pero en los hombres, pueden verse distintos.

Los estereotipos de género y el estigma puede dificultar a los hombres, reconocer que se necesita apoyo en materia de salud mental.

A continuación, te explicamos todo lo relacionado con la salud mental masculina, desde la identificación de los síntomas hasta la búsqueda del tipo de terapia adecuado.

Tipos de trastornos mentales

Los hombres pueden sufrir una amplia gama de trastornos mentales, pero algunos de los más comunes son:

  • Depresión
  • Trastorno de ansiedad generalizada
  • Trastorno de ansiedad social
  • Trastorno obsesivo-compulsivo
  • Trastorno de estrés postraumático
  • Trastorno bipolar
  • Esquizofrenia

¿Son los hombres menos propensos a padecer enfermedades mentales?

Existe la idea de que las mujeres son más propensas a padecer enfermedades mentales que los hombres, especialmente en lo que respecta a la depresión. Pero eso no significa que los hombres no se vean afectados.

De hecho, en 2020, la tasa de muertes por suicidio en hombres fue 3 veces mayor que en mujeres.

Los expertos reconocen cada vez más los complejos factores en juego cuando se trata de las diferencias en la forma en que los hombres y las mujeres experimentan los problemas de salud mental.

Aunque los factores biológicos, como las diferencias hormonales, pueden desempeñar un papel importante, no lo explican todo.

Los estereotipos de género internalizados, las estrategias de enfrentamiento y los prejuicios clínicos, entre otras cosas, también pueden influir en las suposiciones de sobre quién experimenta los problemas de salud mental, por no hablar de cómo los experimentan, a lo que nos referiremos en un momento.

Síntomas de salud mental masculina a los que hay que prestar atención:

Los hombres y las mujeres a veces pueden experimentar la misma condición de salud mental de manera diferente debido a una mezcla de factores biológicos y sociales.

Los síntomas de salud mental masculina pueden incluir:

  • Ira y agresividad
  • Irritabilidad
  • Frustración
  • Abuso de sustancias
  • Problemas de concentración
  • Sentimientos persistentes de preocupación
  • Participación en actividades de alto riesgo
  • Comportamiento inusual que preocupa a los demás o se interpone en la vida cotidiana
  • Pensamientos suicidas

Algunas enfermedades mentales, como la ansiedad y la depresión, también pueden presentar síntomas físicos que la gente podría ignorar. Estos incluyen

  • Cambios en el apetito y la energía
  • Nuevos dolores y molestias
  • Problemas digestivos
  • Problemas para dormir
  • Dormir más de lo habitual

A menudo, los amigos y la familia pueden ser los primeros en notar los síntomas, ya que puede ser difícil reconocerlos cuando se experimentan.

Por qué los hombres dudan en buscar ayuda

Según el Instituto Nacional de Salud Mental, es menos probable que los hombres hayan recibido tratamiento de salud mental que las mujeres en el último año.

Esto no significa que los hombres no necesiten o no se beneficien del tratamiento.

Más bien, "a los hombres les puede resultar más difícil hablar abiertamente de su salud mental y buscar apoyo porque es probable que vaya en contra del tipo de mensajes que recibieron al crecer", explica la Dra. Elena Touroni, psicóloga consultora y cofundadora de The Chelsea Psychology Clinic.

Además, señala que muchas culturas tienen fuertes estereotipos culturales sobre cómo deben comportarse los hombres, especialmente en lo que respecta a la gestión de sus emociones y a parecer "fuertes".

También, los hombres que no hablan abiertamente de sus sentimientos, pueden tener más dificultades para reconocer los síntomas de las enfermedades mentales en ellos mismos.

Cómo buscar ayuda para tu salud mental

Si estás pensando en pedir ayuda pero no estás seguro de por dónde empezar, tienes algunas opciones.

Habla con tu médico

Si acudes regularmente a un profesional sanitario, puede ser un buen punto de partida. Dependiendo de su formación, es probable que te remita a alguien especializado en salud mental, como un psiquiatra o un psicólogo.

Buscar en Internet

También puedes buscar en directorios online.

Por ejemplo, la confederación de Salud Mental en España, ofrece un servicio de orientación en salud mental. Puedes verlo haciendo click aquí.

Si tienes un seguro médico privado, también es una opción que debes tener en cuenta. La terapia no siempre está cubierta, pero algunos terapeutas te proporcionarán la documentación que puedes presentar a tu proveedor de seguros para el reembolso.

Durante la cita

Es probable que el terapeuta dedique una o dos sesiones a conocerte. Esta también es una oportunidad para que conozcas su enfoque, así que no dudes en hacer cualquier pregunta sobre lo que puedes esperar de las futuras sesiones.

Es importante que te sientas cómodo hablando con el experto que elijas. Si sientes que no estás en sintonía con tu terapeuta después de algunas sesiones, siempre puedes explorar otras opciones. Mucha gente tiene que ver a varios terapeutas antes de encontrar a alguien que encaje bien.

Dependiendo de tus síntomas, tu terapeuta puede te puede remitir a un psiquiatra para explorar la medicación, incluidos los antidepresivos.

Ten en cuenta que la medicación no es necesariamente algo que tengas que tomar el resto de tu vida. A veces, sólo proporciona un alivio temporal para ayudarte a empezar a trabajar en las causas subyacentes de tus síntomas. Un psiquiatra también puede ayudarte a superar los efectos secundarios que puedas experimentar.

Si necesitas ayuda ahora:

Ponte en contacto con un consejero capacitado en cualquier momento, cualquier día del año, para obtener apoyo confidencial gratuito:

Llama a Línea de atención a la conducta suicida: 024

Los consejeros de crisis pueden escucharte con compasión, ayudarte a explorar estrategias de afrontamiento en el momento y ofrecerle más recursos de apoyo.

 

Cómo afrontar los síntomas de salud mental

Todo el mundo puede beneficiarse del autocuidado, incluidos los hombres. Aunque trabajar con un profesional de la salud mental puede ser de gran ayuda, hay muchas cosas que puedes hacer para apoyarte a ti mismo entre las sesiones.

Touroni destaca la dieta, el sueño y el ejercicio como factores, pero explica que "también debemos asegurarnos de cuidar nuestro bienestar emocional".

Y a veces, eso significa ser "capaz de reconocer y permanecer con los sentimientos -especialmente los incómodos- en lugar de apartarlos o negarlos".

Es muy fácil permanecer con los sentimientos incómodos, y eso puede hacer que caigas en mecanismos de afrontamiento poco útiles, como el uso de sustancias o la ignorancia de las emociones.

La próxima vez que te encuentres experimentando una sensación o emoción incómoda, prueba esto:

  • Hacer una meditación rápida de escaneo corporal
  • Escribir lo que sientes
  • Practicar algunas técnicas sencillas de respiración
  • A medida que vayas explorando diferentes formas de gestionar tus emociones, sé amable contigo mismo. Si, por ejemplo, en un mal día no consigues los mecanismos de afrontamiento "perfectos", no te castigues. Siempre habrá otra oportunidad para practicar nuevas estrategias.

Aprende a confeccionar tu propia lista de autocuidado que se ajuste a tus necesidades.

Abrirse a los amigos

Hablar de lo que estás pasando con un amigo también puede ser de gran ayuda, pero eso puede ser difícil si tus amigos también son hombres a los que les cuesta abrirse. Pero iniciar esa conversación puede acabar siendo beneficioso para todos.

Mark Meier, director ejecutivo de la Fundación Face It, dice que es importante que los hombres "aprendan a entender los matices de las emociones" y reconozcan que las emociones negativas son "emociones normales y recurrentes a lo largo de la vida".

Recomienda "encontrar a alguien con quien puedas hablar abiertamente de tus retos personales y abrirte a cultivar relaciones más profundas con los demás".

Tu terapeuta puede sin duda ser esa persona, pero también puede resultar útil abrirte a un amigo.

Puedes intentar empezar la conversación con algo como: "He pasado por muchas cosas. ¿Tienes tiempo para ponerte al día esta semana?".

Si te sientes con ganas, también puedes ponerte a disposición de un amigo que lo necesite con un simple: "Me he dado cuenta de que últimamente pareces algo decaído. Sólo quiero que sepas que siempre estoy disponible para hablar si lo necesitas".

Lo esencial

La salud mental puede ser un tema difícil de tratar, identificar lo que te resulta difícil o que podrías necesitar ayuda no siempre es fácil, sobre todo para los hombres

Sin embargo, lo mejor es hablar. Tanto si te abres a un amigo o familiar como si consultas a tu médico, hay ayuda ahí fuera, y también formas de ayudar a gestionar tu salud mental.

Recuerda que no estás solo, y que afrontar los problemas de salud mental requieren también un par de C.O. JONES, tu puedes! 

 

 

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